lunes, agosto 27, 2007

Un respiro

Ahora mismo estoy en clase. Faltan exactamente 33 minutos para que termine. Estamos aprendiendo a editar con Adobe Premiere Pro. Para ello, el profesor decidió que troceásemos plano por plano (45 en total) el spot de las bolitas de 'Sony Bravia'. ¿Por qué escribo si se supone que estoy trabajando? Pues porque yo ya terminé :)

jueves, agosto 23, 2007

Los cuatro fantásticos

Tras la era de los galácticos parece que ahora nos va a tocar oir y leer mil historias acerca de los 4 fantásticos. Ronaldinho, Messi, Eto'o y Henry coparán un gran número de portadas a lo largo de esta temporada. De hecho, los periodistas deportivos ya están ansiosos por empezar, y por culpa de tal deseo la semana pasada al diario Sport se le cogió en pleno renuncio. Me explico:

El pasado 13 de agosto salía en la edición digital del diario Marca la siguiente foto:

Esa misma tarde, en un foro dedicado al F.C. Barcelona, un aficionado colgó dicha foto pero con un ligero retoque (vamos que quitó al guapo de Oleguer sin complicarse lo más mínimo).

Hasta aquí todo bien. Lo curioso viene cuando al día siguiente, día 14, el diario Sport publica la siguiente portada:

Bonita, ¿verdad? Esta está algo mejor retocada. Pero yo me pregunto qué pensará Oleguer de todo esto. Hay quien dice que debería exigir una rectificación del Sport y exigir que lo saquen en portada a él solo. Pero yo creo que no vendería tantos ejemplares. ¿O quizá sí?

martes, agosto 21, 2007

Paredes de Coura 2007

Llegamos el domingo 12 a las 10 de la mañana hora portuguesa. El camping ya estaba repleto. Pero tras buscar y rebuscar durante bastante tiempo encontramos uno de los mejores sitios para acampar: sombra durante toda la mañana y cerquita cerquita de las duchas, baños, puestos de comida y entrada al camping. Un lujazo.

Pocos españoles habían llegado todavía, y aún tardarían. Casi todos llegaban esa misma noche o incluso al día siguiente.

El primer día nos dedicamos a situarnos. El camping estaba colocado a la orilla del río Tabuao, en una playa fluvial. Un lugar muy bonito (aunque con muchas cuestas). Fuimos en busca del pueblo, a una distancia y cuestas similares a las de Ortigueira. Localizamos los supermercados (por si acaso), cafeterías, tiendas y similares.
Una vez hecho todo eso, a tirarnos en el césped a la orilla del río a comer, beber y hacer tiempo hasta la hora en que empezasen los conciertos.
Era el primer día, sinónimo de inauguración y de una menor cantidad de grupos, así que el espectáculo comenzó varias horas más tarde (22:30) de lo que lo haría el resto de los días.

Ese día disfrutamos en mi opinión de uno de los mejores conciertos de todo el Festival, los americanos DeVotchKa, conocidos por ser los autores de la banda sonora de la oscarizada y simpática película 'Pequeña Miss Sunshine'. Se trata de un cuarteto multi-instrumental que fusionan el folk americano con aires de música gitana y mexicana. Tocaban en el escenario pequeño, pero el sonido era mucho más limpio y nítido que la mayor parte de los conciertos del palco Heineken (el escenario grande). Tras Devotchka, subieron al escenario los primeros DJ's del festival, que se encargarían de dar el cierre de cada jornada de conciertos. Como a ninguno de nosotros nos va esa música y estábamos un poco cansados del madrugón y las caminatas de la mañana decidimos ir a zapatearnos a la tienda.

El lunes hubo quien ya empezó a sentir los efectos de pasar frío en la noche y de una mala alimentación, y su situación estomacal continuaría mal durante los dos días siguientes. Menos mal que la organización del festival era de lo mejor y los servicios se limpiaban varias veces al día ...
A mediodía fuimos notificados de la primera y única cancelación del festival. Mando Diao suspendía su actuación por una 'afección del vocalista'. Una pena, porque para nosotros eran el plato fuerte del día.

Como en un festival hay muchos conciertos, uno tiene que escoger de antemano aquellos que quiere ver en primera fila, los que quiere ver algo más retrasado para descansar y los que no te importaría perder y aprovechar el tiempo para comer, beber o realizar otro tipo de necesidades.
Así que el primer día decidimos empezar con los vigueses The Blows, que actuaban en el palco Ibero Sounds. Suenan a lo que suenan la mayor parte de grupos que salen últimamente, Franz Ferdinand, The Strokes ... pero lo hacen bien, e incluso me pareció encontrarles un aire a Iggy Pop en un par de sus canciones, aunque de momento nadie se atrevió a darme la razón.

Para cuando llegamos al palco Heineken, ya había terminado el primero de los conciertos, así que llegamos justo para ver a Sparta. Es un grupo americano que tiene un componente muy emo, pero tenía pinta de sonar bien, pero como casi no se escuchaba... Aunque parezca mentira, los watios estaban reservados para las actuaciones siguientes, en concreto, para Blasted Mechanism, unos frikies portugueses disfrazados que se dedican a montarla en los conciertos, porque eso es básicamente lo que hacen, música poca. Eso sí, lo que hacen, lo hacen bien.
Como no nos gustaba, volvimos a irnos y decidimos volver para, en teoría, el plato fuerte de la noche, los Babyshambles, y digo en teoría porque en la prácitca fue bastante lamentable. Eso sí, el recinto estaba repleto. Estaba previsto que el concierto durase una hora. Pete Doherty y los suyos 'tocaron' 45 minutos, hicieron un descanso de 10 minutos y volvieron para tocar otros 5, en los cuales sonó 'Can't stop me now', de 'The Libertines'. Un fiasco de fulano.

El segundo día también decidimos empezar por el palco Ibero Sounds, pero esta vez el sonido era bastante distinto. 6pm, un dúo de Santiago/A Coruña, podrían ser clasificados dentro del chillout, vamos, que hacen un pop electrónico muy suave y con buen gusto. Justo a mitad de concierto empezó a llover y la gente se fue dispersando. A final del concierto debíamos quedar menos de 100 personas, también motivado por el comienzo de Spoon en el escenario grande. De hecho, nos perdimos el 'I turn my camera on' por estar viendo 6pm. Pero yo creo que mereció la pena.

En cuanto acabó Spoon fuimos raudos a coger sitio para el siguiente concierto. Tocaban Gogol Bordello. Sin duda, el mejor concierto del Festival, y nosotros estábamos en segunda fila (como quien dice). Este grupo es un espectáculo. En las pruebas de sonido ya había un ambiente increíble. Algunos de los miembros de la banda salieron ellos mismos a realizarlas, y empezó la fiesta. Punk gitano se supone que es lo que hacen. En realidad son un grupo de inmigrantes de Europa del este (en concreto, el cantante es un refugiado que tuvo que emigrar de Ucrania tras el desastre de Chernobill y estuvo por media Europa antes de acabar en Nueva York, de donde viene el grupo) que hacen punk con influencias de la música gitana y rusa. Una fusión increíble.

Sonó 'Start wearing purple', 'Think locally, fuck globally' y muchas más, aunque yo eché en falta otro temazo, 'Inmigrant punk'. Lo que no entiendo es como la organización puso este concierto a las siete de la tarde, a plena luz del día...

Tras Gogol Bordello volvimos a descansar un rato, y nos perdimos a Architecture in Helsinki que, según dicen, no estuvo mal del todo. Volvimos para ver a Mao Morta, otro grupo portugués beneficiado en el horario por la organización. No sé que tal sería el concierto. Pero a mí no me gustaba lo que hacían, así que no prestamos mucha atención.

Cuando empezaban a sonar los primeros acordes de los New York Dolls volvimos a acercarnos al escenario. Dicen que como más de la mitad del grupo original ya no está no deberían hacerse llamar New York Dolls, que deberían hacer como Marky Ramone y no usar el nombre de la banda para beneficio propio. Aunque no es lo mismo 'llamarse' Marky Ramone (la gente ya te identifica al momento), que Sylvain Sylvain. A mí eso no me supone ningún problema, si se lo permito a Axl Rose con Guns N' Roses, los New York Dolls pueden hacer lo que quieran... En fin, que New York Dolls no estuvieron mal. Lo poco que sabía de ellos es que pertenecían a la ola de grupos punk que nacieron a mediados de los 70 en la ciudad estadounidense, aunque en el concierto había canciones que me sonaban más a Aerosmith (salvando las distancias) que a los Ramones.

El último concierto correspondía a los también estadounidenses Dinosaur Jr. Por lo que había escuchado en disco, una mezcla entre el sonido grunge de Pearl Jam y el noise de Sonic Youth, aunque con solos a lo Neil Young de por medio. Prometía. La lluvía ya era de tormenta veraniega y llevaba cayendo sin parar desde hacía más de 3 horas. Se notaba en la afluencia de público. Ni una cuarta parte en comparación con el día anterior a la misma hora. De hecho, al principio del concierto, mi grupo se deshizo y pasó de 4 componentes a 2, y a mitad del concierto ya estaba yo solo. Pero estaba en 2ª fila (y estaba vez no es una forma de hablar) y no iba a desaprovechar esa ocasión. Total, ya estaba empapado... Aunque he de reconocer que me decepcionó un poco. No es que el concierto estuviese mal, pero tampoco fue memorable. Más bien, fueron correctos. Ni de lo mejor, ni de lo peor del Festival.

Tocaba descansar, que al día siguiente venía el plato fuerte. Por la mañana seguía lloviendo, así que decidimos que no íbamos a pasar la noche del miércoles en la tienda, sino que en cuanto acabase Sonic Youth cogeríamos el coche para Vigo. No sólo por la lluvia. Dos de nosotros teníamos planes para el jueves por la mañana, y además, el cansancio ya se dejaba notar.
Como era el último día, decidimos darnos un caprichillo y dejamos las conservas y el pan de molde en la mochila y nos fuimos a comer un 'porco no espeto' que servían en el camping que estaba de vicio. Bien te podía tocar lomo, jamón o lo que fuese, pero ¡¡la salsa era lo mejor!!
Un bocadillo no abundante, pero tampoco rácano por 2,5€. No estaba mal para los precios que suele haber en los festivales.
Tras comer y echar un par de tutes, la lluvia comenzó a amainar, y el cielo a despejarse. Finalmente, se quedó una tarde y una noche increíbles para lo que había sido la mañana. Aprovechamos para hacer la última visita al pueblo y tomar algo cómodamente sentados para llegar a la noche en condiciones. Nos encontramos con que una Coca-Cola de lata no valía más de un euro, y una Fanta Naranja 80 céntimos, una ganga. ¡¡Qué envidia!!

Como estábamos tan cómodos no decidimos bajar al recinto hasta el segundo concierto, Electrelane. Un grupo que también se acercaba al sonido de Sonic Youth y la Velvet, pero esta vez con bastantes menos decibelios. No me gustó su concierto porque tampoco me gustó su música.
Tras estas chicas subieron al escenario el grupo brit del festival, The Sunshine Underground. Rock bailable, al estilo de Hard-Fi o de The Bravery, con una hora de concierto muy intensa y con mucha energía, sobre todo a medida que nos íbamos acercando al final del concierto. Para mí, otro de los conciertos del Festival. Ya lo decía el propio presentador de la TV Portuguesa 'Antena 3', que tenía un stand enfrente del escenario: 'sem dubida, son a sorpresa possitiva do festival' (o algo por el estilo, es que no sé escribir portugués, lo entiendo y lo leo, pero poco más).

Tras la energía británica llegó la calma sueca de Peter Bjorn and John, un grupo pop conocido sobre todo por la canción del silbido, 'Young folks', aunque demostraron que tienen más bazas que esa canción. 'Objects of my affection' y sobre todo una acústica titulada 'Amsterdan' y dedicada a John Cale (que si no me equivoco era el guitarra de la Velvet) son dos buenos ejemplos.

Cuando terminó este concierto fuimos a cenar algo y volvimos justo al inicio de los/las esperados/as brasileños/as Cansei de Ser Sexy, uno de los grupos revelación del año pasado según dicen los entendidos. A mi me pareció otra de las grandes decepciones (y ya son varias) del Paredes de Coura 2007. Un grupo que se supone que tiene como mayor baza a explotar en su directo la energía de sus composiciones. Pues se quedó en un bluf. Un concierto sin la menor fuerza. Y cuando no tienes fuerza tiras de calidad, pero si tampoco la tienes, mal vamos. Unos malos teloneros para unos buenos cabezas de cartel.

Sonic Youth, un grupo que no era para nada una de mis debilidades, subieron al escenario y demostraron por qué eran cabeza de cartel, por qué llevan tocando más de 20 años juntos y por qué había tanta gente esperando para verlos a ellos. Estos tíos (y una tía) sí que dieron un buen concierto. De hecho, me hicieron vivir mi mejor momento del Festival cuando en la canción previa al primer bis dejaron de cantar y se pusieron a tocar la batería, las dos guitarras y los dos bajos. Cerré los ojos y (aunque suene cursi lo diré) me imaginé que yo también estaba encima del escenario tocando una de las guitarras junto al resto del grupo y hacía disfrutar con ello al público. Y todo eso sin influencia del alcohol ni de ningún otro psicotrópico, sólo con la música. Muy buenos.

Y hasta aquí el resumen de lo que fue el XV Festival Paredes de Coura. Los que hayáis llegado hasta aquí os merecéis un reconocimiento (mental, porque hay que estar mal de la cabeza para tragarse todo este texto).
Un saludo

viernes, agosto 10, 2007

Retiro

Esta semana estuve de retiro un par de días por terras de Celanova, concretamente en Vilanova dos Infantes, donde según Curros "é mais tépedo o vento que a terra Galega azouta...", el pueblo en el que pasé la gran mayoría de veranos en mi vida. De hecho, los pasé absolutamente todos (de julio a septiembre, ambos meses incluidos) hasta hace apenas 3 años.

Pero como supongo que os pasará a todos con alguno de esos lugares a los que dejasteis de ir durante algún tiempo, yo descubrí que ir a Vilanova ya no era lo mismo. Ya de aquellas, los amigos/as se iban echando novias/os, iban encontrando trabajo... y ahora simplemente ya no viven allí ni van (vamos) a pasar las vacaciones. Las únicas fechas en las que se puede encontrar a la gente es en fiestas (que en Vilanova/Celanova no son pocas en verano), pero como suele ocurrir, coinciden con las demás fiestas de Galicia o con cumpleaños, o con festivales, o con planes realizados anteriormente, o con ... bueno, la cuestión se acaba pareciendo casi en encontrar una excusa para no ir, aunque realmente no sea así.

De todas formas, se echa de menos pasar más tiempo allí, no deja de ser tu segunda casa, tus amigos y tu familia.